Considerado como uno de los países con mayor estabilidad y valores democráticos de todo el continente africano, la República de Cabo Verde solicitó oficialmente a la ONU que a efectos oficiales dejaran de traducir su nombre a otros idiomas. Pero es que este archipiélago macaronésico recibió su denominación por la península de Cap-Vert de Senegal a más de 500 km de las islas, por lo que el famoso cabo verde tiene poco que ver con el país.
A pesar de sus buenas métricas de convivencia pacífica, tampoco podría considerarse el Reino de Wakanda. Su mayor auge dentro de la Corona portuguesa se debía a su posición privilegiada como escala naval para América y con la abolición del esclavismo, su economía se redujo drásticamente hasta la aparición del turismo.
Dentro de la serie olímpica, nunca un atleta caboverdiano ha ganado una medalla olímpica, aunque participan solamente desde los juegos de Atlanta de 1996.
Los caboverdianos, que ya son mayoría fuera de su propio país por la emigración hablan su propia lengua criolla, aunque a efectos administrativos usan el portugués. El kriolu contiene de un 90 a un 95% de vocabulario portugués y el resto procede de múltiples lenguas africanas.
La bandera, que irónicamente no contiene el color verde, representa el cielo y el mar y una carretera de paz y esfuerzo en el con diez estrellas doradas, por cada una de las islas del archipiélago volcánico.
Ti prosima vez