En los métodos antiguos de iluminación, mucho antes de los halógenos de bajo consumo o las lámparas de LEDs, se producía una degradación en la cantidad de iluminación suministrada por el consumo del pábilo, es decir, el cordel que guía cómo se quema una vela. La sección carbonizada de la mecha apenas ilumina, por lo que era necesario proceder a una operación denominada «despabilar», que implicaba la supresión de la zona inservible para devolver el brillo a la llama de la vela.
Por el símil luminoso y la mejora en el proceso que sustituyó los pábilos por filamentos metálicos en botellas de cristal, el sentido original quedó en desuso, pero no así el concepto de despertar la inteligencia o el nivel de atención de los interlocutores, a través de los verbos espabilar y despabilar y sus correspondientes participios usados como adjetivos de resultado de este proceso de avivamiento intelectual.
Aliphant CDLXIV. Despabilados