Croacia es un país que pese a ser casi diez veces más pequeño que España, tiene mayor línea de costa. ¿Qué quiere decir eso? Que es muy costosa. Calcúlese la recaudación de las tumbonas que se pueden colocar a lo largo de 5.800 km de playa y verán lo costosa que puede resultar…
Pero lo que lleva a Aliphant a Croacia es su idioma, el croata. En la antigua Yugoslavia, la lengua oficial de los yugoslavos era el llamado idioma serbocroata, que tras la disgregación del país se separó en serbio, croata, macedonio, esloveno, montenegrino, bosnio,… en un sinfín de variantes mutuamente inteligibles.
El croata pertenece a las lenguas eslavas del sur y se escribe con caracteres latinos en oposición al serbio, que usa los cirílicos. No obstante, necesita ampliar los caracteres latinos con tildes y barras para poder registrar su gran variedad fonética como lengua eslava.
Los meses del año reciben una denominación autóctona, basada en fenómenos naturales. Así «listopad», algo así como «caída de las hojas» es el nombre del mes de octubre en croata. La lengua, realmente en su idioma, se llama hrvatski y se supone que es el origen de nuestra palabra corbata, por ser sus soldados quienes pusieron el atuendo de moda en Versalles.