No Se Ven

Un cardinal in pectore, aunque pudiera tratarse de un hematoma localizado sobre la superficie cutánea de una glándula mamaria, es un purpurado de cuya existencia únicamente sabe el Papa, principalmente por motivos de seguridad para el propio cardenal en ambientes hostiles. Si en el testamento papal no se revela su identidad, pierde su rango hasta que el próximo Papa quiera de nuevo ascenderle, a ser posible, públicamente esta vez. Esta misma figura se da en muchas empresas, si bien incluso los interesados lo desconocen. Cuatro obispos ascendieron al cardenalato por mediación de Juan Pablo II: uno en China, otro en Ucrania y otro en Letonia. El cuarto permaneció siempre oculto.

 

Como, al parecer, Benedicto XVI no albergaba en sí mismo ninguna promoción, y si no, y como excepción de los últimos 598 años, lo recordaría, el tema de la viñeta cambia completamente de dirección para tratar de los siete pecados capitales, o como dice Il Cavalliere,  “a ver qué podemos hacer hoy”.

 

De la película Seven surge esta impactante escena final… u otra que se le parece por encima, así, de lejos.

Aliphant DXLVIII

Aliphant DXLVIII No Se Ven

Deja una respuesta