De la razón de la existencia del TNANT hay un claro culpable: el Quidditch fçde J.K. Rowling en Harry Potter. Pese a las apariencias y la necesidad de desarrollar las habilidades atléticas de su protagonista, poco a poco y libro tras libro daba la sensación de que la autora odiaba este recurso como se puede aborrecer el fútbol o el tenis, y de hecho, tanto de los libros como de las películas, va perdiendo peso en el argumento.
Asimismo, en ANT existe un juego ficticio no menos absurdo, con un nombre simétrico, el palíndromo TNANT, que usa una pelota extravagante en forma de huevo y cuyo origense remonta a la necesidad de resguardar a lugares más seguros las larvas en el hormiguero.
El conjunto de reglas es tan complejo y específico de la anatomía de las hormigas que la presencia forzada de Aliphant en el equipo de Realidad Virtual le resulta todavía más insufrible. No obstante todos sus compañeros anhelan también ser expulsados para ahorrarse lo que consideran una gran pérdida de tiempo.