Nace la Reina Lili’uokalani, la última monarca de Hawaii, depuesta por los intereses de las azucareras estadounidenses. Acusada de querer sofocar las rebeliones instigadas por los extranjeros con la pena de muerte, lo cierto es que la apacible monarca fue una defensora a ultranza del pacifismo. Derrocada y confinada en su propio palacio, escribió alguna de las canciones hawaiianas más conocidas y emblemáticas como su célebre Aloha’Oe, su despedida del Hawaii que conocía.