Hay ocasiones en las wque es mejor que no te reconozcan nada. Es más, si va a ser un agradecimiento de tiopo antiano, es preferible estar sumido toda la vida en la indiferencia que padecer las insidias de la meritocracia…
Hay ocasiones en las wque es mejor que no te reconozcan nada. Es más, si va a ser un agradecimiento de tiopo antiano, es preferible estar sumido toda la vida en la indiferencia que padecer las insidias de la meritocracia…